¡FELICES vacaciones!
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Los niños terminan el año escolar un poco cansados, un poco sobrecargados por tanta euforia, muestras, fiestas y despedidas…. Fue un tiempo lleno de rutinas, actividades, horarios, tareas, obligaciones….
Ahora, toca prepararse con algunas sugerencias para que sean unas ¡FELICES vacaciones!
- Ofrecer y favorecer el descanso (dejarlos que duerman hasta la hora que necesiten, tal vez alguna siesta).
- En la medida de las posibilidades, pensar en un intervalo y una transición entre la finalización escolar y las colonias de vacaciones. Los niños necesitan y disfrutan de estar en casa y redescubrirla.
- No es necesario organizar demasiadas actividades. Es muy bueno que dispongan de tiempo libre y que elijan la actividad que quieran para ocupar ese tiempo.
- Favorecer encuentros informales, no estructurados y con niños de su edad amplía el proceso de desarrollo de múltiples habilidades sociales (compartir, escuchar, prestar atención, ofrecer y resolver situaciones de conflicto); todas ellas, fundamentales para el crecimiento.
- Muchas veces, los adultos nos sentimos culpables o presionados si no programan salidas fuera de casa (al parque, al cine, al zoológico, al campo, a la pileta…), pero en casa también se pueden disfrutar muy buenos momentos y aprovechar el tiempo libre para estar en familia, sin las prisas y agobios de los días laborables.
A continuación les ofrecemos algunas ideas para que pasar el día en casa se convierta en una fiesta.
Hacer un “Frasco de Ideas”: que ellos piensen y escriban en papelitos, dibujen o dicten ideas para hacer cuando están en casa y no sepan cómo ocupar el tiempo. Doblamos los papelitos (para que no se vea lo que dice) y los colocamos en un frasco (que pueden decorar). Puede ser muy útil para inspirarse o destrabar esos momentos en los que están aburridos. Así, ¡el frasco de ideas resulta siempre una sorpresa!
Crear cosas con objetos: una caja grande de cartón colocada boca abajo, para que puedan recortarse puertas y ventanas o ser pintada, puede transformarse en una casa, un castillo de princesas, un laboratorio científico, una guarida, un negocio, un barco… Si no hay cajas, también pueden funcionar un par de sillas y una sábana que haga de techo.
Dibujar: A todos los niños les gusta dibujar desde muy pequeños. El dibujo contribuye al desarrollo de los niños.
Hacer masa: la receta para hacer masa y guardarla en la heladera para jugar varias veces es: 2 tazas de harina común, 1 taza de sal fina y agua suficiente para unir los dos elementos. Unir la harina con la sal. Agregar agua hasta obtener una masa suave que no se pegotee en las manos. Se puede preparar blanca o agregar tempera diluida en el agua.
Leer cuentos: buscar aquellos que son apropiados a la edad y a los intereses. Dibujar luego personajes favoritos. Disfrazarse del personaje… hablar como el personaje…
Hacer collages: a los niños les encantan todos los objetos y materiales que no se emplean habitualmente para jugar, por eso proponemos hacer un collage reuniendo lo que encontremos en casa como algodón, lentejas, arroz, fideos, botones grandes, recortes de revistas, hilos de colores, lana... Podemos usar también piedritas y caracoles, las hojas que se han caído de los árboles o de las plantas de casa, palitos, flores, etc. Comprando una cartulina que no sea muy fina o cortando un lateral de una caja grande de cartón, ya tendremos el “lienzo” donde plasmar el collage, con la ayuda de pegamento.
Disfrazarse: a los niños les encanta!! Buscar junto con ellos cosas que sirvan para eso. Es mucho más interesante y creativo jugar a “dale que esto era” en lugar de a "que esto realmente es" (un vestido de princesa, una espada…etc). Se puede usar una caja para poner cosas que sirvan de disfraz (delantal de cocina, mantel, algún collar que no usemos, zapatos, anteojos de sol, teléfonos, carteras…). También podemos confeccionar una lista junto con ellos y pedir a familiares, vecinos o amigos que colaboren con la caja.
Si el plan es salir, acá van algunas ideas para pasarlo muy bien.
La naturaleza es en sí misma una caja de sorpresas…. Sólo hay que estar dispuesto a descubrirla. Las plazas tienen los clásicos juegos (algunos son muy divertidos, otros no tanto…). Siempre es conveniente tener un plan alternativo (por si está superpoblada, por si la plaza no tiene juegos seguros o porque los niños son muy pequeños para los juegos que hay) O simplemente porque nos gusta hacer otras cosas! Estas mismas ideas sirven si las vacaciones son en una playa
- Llevar en un bolso agua, mucha agua (en épocas de calor hay que estar bien hidratados! Protector solar y gorro
- Hojas para dibujar y lápices, crayones…
- Una pelota
- Un colador para atrapar moscas, mariposas, mosquitos…
- Una lupa ( seria de gran utilidad para descubrir el universos de las hormigas
- Una bolsita con migas de pan, para que vengan las palomas a saludarnos
- Pala y balde y diferentes potes que sirvan para jugar con agua, arena, piedritas o caracoles
- Un mantel para hacer un picnic y tomar el agua con algunas galletitas
- Algún muñeco que quiera venir...
- Una caminata tipo “búsqueda del tesoro”. puede ser una gran motivación para ver qué elementos se pueden utilizar para un collage
- Una regadera o vaporizador para regar plantas y flores